Casi un centenar de familias ribereñas, en riesgo inminente de quedarse sin casa

27 febrero, 2018

Un total de 90 solicitudes asegura que tiene sobre la mesa el área de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Aranjuez relativas a lo que la Comunidad de Madrid denomina Adjudicación de Vivienda Pública por Especial Necesidad. Se trata de un trámite de emergencia habitacional que trata de dar respuesta a aquellas situaciones de urgente demanda de vivienda, que suelen coincidir habitualmente con inminente pérdida del hogar, lo que la normativa autonómica llama “circunstancias económicas”. Los trámites van demasiado lentos, y esta semana se han registrado dos casos de desahucio que todavía no han encontrado alternativa habitacional.

Según ha manifestado en Pleno la concejal ribereña de Servicios Sociales, Montserrat García, de esas 90 solicitudes de “especial necesidad” un total de 49 están siendo tramitadas en colaboración con la Comunidad de Madrid, sin que se haya referido plazo de resolución o perspectivas de la misma. Lo que significa que hay otras 41 familias cuya solicitud de “especial necesidad” todavía está pendiente de una resolución que dé alguna solución a su situación. Son las consecuencias de la resaca inmobiliaria; una vez que los desahucios por impago hipotecario han descendido tras las dramáticas cifras de la crisis, la cronificación de la pobreza ha trasladado este problema al mercado del alquiler, más o menos regular, y a la ocupación de viviendas.

Con una población en edad de trabajar cercana a los 40.000 vecinos y vecinas, y una cifra de trabajadores ocupados que no llega ni a la mitad, el riesgo de exclusión social de un número considerable de familias de Aranjuez aumenta exponencialmente, y las infraestructuras de las que dispone el municipio para dar solución habitacional a los casos de desahucio inminente no son suficientes. Con varias viviendas de titularidad municipal pendientes de remodelación y sin las garantías necesarias de habitabilidad, urge la puesta en marcha de un plan de mejora de estos inmuebles que desahogue la situación y permita dar respuesta a casos como los de estas dos familias que ya se han quedado en la calle.

No estaría de más habilitar el albergue San Vicente de Paúl para que puedan acceder mujeres en condiciones de intimidad y salubridad, y recuperar el Refugio del Cortijo de San Isidro, que podrían servir también para ofrecer alternativas en estas situaciones tan adversas. Porque, a día de hoy, la única alternativa habitacional que pueden disponer aquellos que pierdan su domicilio en estos días es “llamar al 112”, ponerse en manos de los servicios de Emergencias de la Comunidad de Madrid y empezar un periplo por albergues y espacios fuera de Aranjuez, buena parte de ellos en Madrid capital.

Una ciudad libre de desahucios, como así se declara Aranjuez, debe tener en marcha una red de inmuebles destinados a situaciones de extrema urgencia como las que se están registrando en estos días, Para eso, claro está, hay que dejar hueco presupuestario, y recursos, para acondicionar esos inmuebles, que los tiene, y en un número digno, tanto este Ayuntamiento como otras instituciones, nos acordamos ahora fundamentalmente de Patrimonio del Estado. Es un principio básico de obligado cumplimiento.

Última vez modificado: 27 febrero, 2018

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